Estas presentaciones son la culminación del proyecto AIR S+T+ARTS, cofinanciado por la Comisión Europea, en el que artistas internacionales han trabajado en colaboración con expertos del ámbito científico y tecnológico
El BSC ha sido uno de los pilares fundamentales de AIR S+T+ARTS, liderando la parte científica de tres de los proyectos más innovadores de esta edición: Impossible Larynx: An Artistic Research on Modeling Voices, en el que la artista Maria Arnal crea un gemelo digital de su aparato fonador capaz de reproducir todas las posibilidades de una voz humana; Breathing Architecture, en la que el artista italiano Filippo Nassetti explora la respiración humana a través de arquitecturas biomiméticas, y Electric Atmospheres, en el que el diseñador holandés Richard Vijgen muestra los paisajes invisibles que crean las ondas electromagnéticas que emiten nuestros teléfonos móviles.
Durante los días 26 y 27 de octubre, el Puerto de Badalona será el escenario de la culminación del proyecto AIR S+T+ARTS, una iniciativa pionera que conecta a artistas, científicos y tecnólogos en una colaboración única a escala europea. Este evento marca el final de las residencias artísticas del proyecto AIR S+T+ARTS, cofinanciado por la Comisión Europea, y forma parte de la programación del Festival The Gate, organizado por la Fundació Èpica La Fura dels Baus. El encuentro representa una oportunidad única para descubrir cómo la ciencia y el arte han colaborado estrechamente para generar innovaciones que llevan el conocimiento científico a la sociedad de una forma creativa y accesible.
El proyecto AIR S+T+ARTS se inscribe en la plataforma S+T+ARTS (Science, Technology & The Arts), cuyo objetivo es fomentar la colaboración entre la ciencia y el arte para afrontar algunos de los retos más acuciantes de nuestro tiempo, como el cambio climático, la urbanización y la integración de tecnologías avanzadas en nuestro día a día. Este año, el proyecto ha reunido a diez artistas internacionales que, tras un riguroso proceso de selección, han trabajado conjuntamente con reputados centros de investigación tecnológica, como Barcelona Supercomputing Center - Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), SONY Computer Science Laboratories y High Performance Computing Center Stuttgart (HLRS).
Los proyectos desarrollados durante estas residencias exploran temáticas tan variadas como la voz humana, las ondas electromagnéticas y la respiración, creando un puente entre la investigación científica y la expresión artística.
El programa de las residencias artísticas gira en torno al concepto del aire, entendido no solo como sustancia invisible que respiramos, sino que el término va mucho más allá. El aire aborda tanto elementos visibles como invisibles, complementa nuestros sentidos y conecta con el entorno. Está estrechamente ligado al cuerpo humano y es vital para la comunicación verbal, la existencia del sonido y, por consiguiente, del lenguaje y el pensamiento lógico. A su vez, el programa de residencias se ha centrado en dos temas principales: ecosistemas urbanos resilientes entre especies y ecosistemas humanos de inteligencia artificial, presentando una oportunidad única para que los artistas colaboren en la intersección del arte, la ciencia y la tecnología.
El Barcelona Supercomputing Center da voz y forma a la fusión de ciencia y arte
El BSC ha sido uno de los pilares fundamentales del proyecto AIR S+T+ARTS, liderando la parte científica de tres de los proyectos más innovadores de esta edición. Con más de diez años de experiencia impulsando la intersección entre arte y ciencia a través de su línea Art+Science Driven Innovation, el BSC ha utilizado sus capacidades de supercomputación para desarrollar nuevas herramientas y visualizaciones que permiten a artistas y científicos colaborar en proyectos que aborden fenómenos complejos desde perspectivas innovadoras.
Uno de los proyectos en los que el BSC ha participado directamente es Impossible Larynx, desarrollado por la cantante y compositora Maria Arnal en colaboración con un equipo de investigadores del BSC. Arnal, conocida por su capacidad de explorar la voz humana y sus dimensiones colectivas, ha trabajado con el BSC para crear una herramienta de inteligencia artificial capaz de extender los límites de la voz humana. El proyecto, liderado por el científico Fernando Cucchietti y su equipo del BSC Data Analytics and Visualization Group, ha desarrollado un gemelo digital de su tracto vocal, lo que permite simular y reproducir las infinitas posibilidades de una voz humana.
“Este tipo de proyectos son realmente motivadores porque combinan desafíos tecnológicos, algunas veces definidos y otras aún por descubrir, con una aplicación que no es puramente técnica, sino que incluye componentes emocionales y es apreciada por un público general. Eso hace que el éxito no siempre se mida por la precisión técnica, sino por la apertura y la imprevisibilidad del proceso de descubrimiento”, explica Cucchietti.
El proyecto integra modelos de procesamiento de voz y una visualización en 3D del tracto vocal, que responde en tiempo real a una entrada de voz externa. Esta herramienta no resulta solo una innovación en el ámbito musical, sino que representa una nueva forma de explorar la voz como instrumento digital. Gracias a la capacidad de supercomputación del BSC, se ha conseguido crear un prototipo de web app que permite al usuario interactuar con la voz de una forma completamente nueva: cantar, hablar e incluso escribir: la aplicación modula la voz en función de los parámetros del tracto vocal simulados en tiempo real.
La colaboración entre Maria Arnal y el BSC tiene su origen en un proyecto conjunto anterior, Maria CHOIR, financiado por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT). Esta obra fue expuesta en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB), dentro de la exposición IA: Inteligencia Artificial, y ha sido galardonada este mismo año por la Comisión Europea con el premio S+T+ARTS Honorary Mention en el festival Ars Electronica, uno de los eventos más reconocidos a nivel internacional sobre arte, tecnología y sociedad. El nuevo proyecto Impossible Larynx ha abierto nuevas vías de investigación en la síntesis de voz aumentada por IA, con aplicaciones potenciales que van más allá de la música, explorando cómo la tecnología puede influir en la creatividad artística y el conocimiento profundo de la voz humana. Impossible Larynx fue presentado por primera vez en el marco del Sónar+D, con gran éxito; en el Festival The Gate, el público tendrá la oportunidad de vivir una experiencia inmersiva con esta herramienta interactiva.
Explorando la respiración y las ondas electromagnéticas con supercomputación
El BSC ha tenido también un papel destacado en otros dos otros proyectos científicos que podrán verse en el festival. Uno de los proyectos que muestran la fusión entre ciencia y arte es Electric Atmospheres, creado por el artista neerlandés Richard Vijgen. Dicho proyecto pone de manifiesto la presencia invisible de las ondas electromagnéticas que emiten dispositivos cotidianos como nuestros teléfonos móviles. Con el apoyo del BSC, Vijgen ha utilizado simulaciones computacionales avanzadas para visualizar cómo estas ondas interactúan con los entornos urbanos, transformando el paisaje arquitectónico de ciudades como Barcelona o Rotterdam. A través de la visualización artística, Electric Atmospheres ofrece una forma completamente nueva de entender la tecnología que nos rodea y su influencia en el espacio que habitamos.
“La parte científica de Electric Atmospheres se basa en la simulación computacional avanzada para comprender la interacción entre la arquitectura y las ondas electromagnéticas en entornos urbanos. Esta integración de ciencia y arte ha ampliado mi comprensión de cómo estos campos pueden complementarse mutuamente y enriquecerse el uno al otro, ofreciendo una plataforma importante para la divulgación científica”, señala Octavio Castillo, investigador del BSC que participa en este proyecto.
Otro de los proyectos es Breathing Architecture, un proyecto creado por el artista italiano Filippo Nassetti, que explora la respiración humana desde un punto de vista arquitectónico. A través del uso de técnicas de supercomputación avanzada, Nassetti ha trabajado con un equipo de científicos liderado por la investigadora Beatriz Eguzkitza, del BSC, para moldear y simular arquitecturas respiratorias sintéticas inspiradas en la biomimética. Este proyecto abre nuevas perspectivas no solo en el campo de la arquitectura, sino también en el diseño de entornos que respondan mejor a las necesidades del cuerpo humano, ofreciendo una visión estética y funcional sobre los procesos biológicos que regulan la respiración.
“Explorar el potencial de la colaboración multidisciplinar para impulsar la innovación científica y tecnológica ha resultado un éxito absoluto. Al principio no sabíamos hasta dónde podríamos llegar, pero la fluidez con la que se ha desarrollado todo el proyecto ha sido impresionante. Las soluciones biomiméticas propuestas por Filippo han superado todas mis expectativas, y sus visualizaciones no solo son estéticas, sino que nos han ayudado a entender mejor el comportamiento de los fluidos y a comunicarnos con otras disciplinas, como el sector de la salud”, comenta Eguzkitza.
Además de estos tres proyectos, el BSC ha apoyado también en la investigación, en mayor o menos medida, a Antoine Bertin (Making all voices of the city Heard, proyecto que emplea la IA como herramienta para comprender mejor la multitud de sonidos no humanos que habitan los paisajes urbanos), Michail Rybakov, Jonathan Reus, Natan Singiglia y al colectivo Uncharted Limbo.
Una plataforma para el diálogo entre ciencia, arte y sociedad
El Festival The Gate, organizado por la Fundació Èpica La Fura dels Baus, no es solo un espacio para la presentación artística, sino también una plataforma para el diálogo interdisciplinario entre científicos, artistas y tecnólogos. Durante los próximos días 26 y 27 de octubre, el público tendrá la oportunidad de explorar cómo los artistas han colaborado con más de veinte expertos científicos para desarrollar proyectos que abordan retos sociales, tecnológicos y medioambientales.
Así, el Port de Badalona se convertirá en el punto de encuentro entre el arte, la ciencia y la tecnología, gracias al apoyo del BSC y otros centros líderes, como RCR Lab·A y SONY Computer Science Laboratories. Este evento ofrece una oportunidad única para todos aquellos interesados en ver cómo la innovación científica y la exploración artística pueden trabajar conjuntamente para afrontar los grandes retos de nuestra sociedad.
Foto: Científicos del BSC y artistas que han participado en el proyecto AIR S+T+ARTS (Mario Ejarque/BSC)